viernes, 28 de septiembre de 2007

Todavía quedan zonas fuera de Occidente, donde se sabe que el parto y la maternidad son episodios de la vida sexual de una mujer. Las mujeres de la India visualizan los pétalos de la flor de loto abriéndose para abrir el canal del nacimiento, un abrir suave, sin violencia alguna; claro que no se les ocurre ponerse a parir en decúbito supino, en medio de focos, entregadas a las órdenes de las autoridades médicas. En zonas de Arabia Saudita las mujeres bailan la danza del vientre entorno a la parturienta hiponotizándola con sus movimientos rítmicos ondulantes para que también ella se mueva a favor del cuerpo en lugar de moverse contra él.

Casilda Rodrigáñez.

2 comentarios:

Arlenne dijo...

Intenté el otro día mandarte un buen comentario, pero el señor Blogger me lo borró y no me dió opción a más, suego me he liado y siento que necesito contarte todo lo que pasó por mi mente mientras leía el relato de tu parto.
Te diré que tuve que dejar de leer en algún momento para coger aire, porque te juro que me envolviste tanto, que hasta hacía fuerzas yo.
También tuve que salir de la habitación a lavarme la cara porque las lágrimas me caían de vez en cuando. Tienes magia, me haces recordar los momentos de mi propio parto y los sentimientos son ahora más serenos que entonces, cuando sólo me importaba que la criatura naciera bien y yo y mi propio ser pasaban a un segundo plano, no importaba el daño, las consecuencias,o lo que tuviera que hacer, lo único importante era que aquel ser que había gestado dentro de mí saliera a la vida sano y salvo. Era mi único pensamiento! Ahora lo veo diferente, me inspiras mucha ternura, Turca!

TEA CUP CLUB dijo...

Muy lindo tu post, nos remontas al dia que nuestros hijos nacieron

Te dejo mi carino y una tacita de te

Veronica